Comencé con un proyecto de exportación de Piloncillo a E.U., algo que me parecía sencillo, pero para nada lo era, ya que se trata un producto artesanal y no cumple con normas de sanidad básicas ni certificaciones HACCP.
Tuve muchos aprendizajes, pero uno de los más importantes fue aprender a decir “¡Alto, esta no es la manera!”.
Esto me ha permitido poder mirar hacia nuevos horizontes y buscar soluciones trabajando con un enfoque distinto según los resultados.
A lo largo del tiempo he logrado lanzar 4 marcas: Méximo Distribution, Conejo en la Luna, Pasión México, Siendo Luz y actualmente está en proceso de lanzamiento Bixhidu; todas ellas relacionadas con productos mexicanos artesanales.